Bárcenas elaboró los datos del ‘pendrive’ en los 90 según la Policía

Descarta una «manipulación posterior»

La Policía Científica sostiene que la contabilidad B del PP que Luis Bárcenas entregó al juez en un pendrive fue elaborada en los años 90, y que no hay indicios que apunten a «una manipulación posterior». Según se desprende de un informe remitido al juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz por la sección de Informática Forense, las anotaciones sobre las entradas y salidas de dinero negro entre 1990 y 1994 no fueron elaboradas ex profeso por el ex tesorero tras estallar el caso Gürtel.

Tras recibir, el pasado 30 de julio, el encargo de examinar la memoria portátil, dos peritos comenzaron a examinar uno a uno los 13 archivos señalados por el juez. Incluían datos de cuentas suizas, gastos electorales y de sedes provinciales del PP, pero los más relevantes eran los que recogían la contabilidad B del PP entre 1993 a 1996, cuatro ejercicios sobre los que hasta entonces no había datos.

El análisis informático da veracidad a la declaración de Bárcenas: lo que presentó al juez como contabilidad de los 90 se elaboró, efectivamente, en los 90, según las fechas en las que los archivos fueron modificados por última vez y los programas empleados parea ello. «El formato de los archivos y las versiones de la aplicación Excel usadas corresponden con las existentes en el momento que consta como última modificación de cada uno de los ficheros. En los casos en que ha podido determinarse además el sistema operativo utilizado también coincide con el existente en la época. En aquellos archivos en que se ha obtenido información adicional [...] no se ha observado la existencia de discrepancias entre los datos adicionales obtenidos del formato binario de los ficheros (metadatos) que pudieran indicar una manipulación del contenido de los mismos posterior a la fecha que consta como última modificación», dicen los forenses, que han sido citados en la Audiencia para ratificar su informe.

El apartado de conclusiones presenta una objeción sobre la que los expertos serán interrogados con toda seguridad: que «el contenido de algunos archivos parece incongruente con la fecha de última modificación de los mismos». Por ejemplo, una de las versiones de la contabilidad del 1993 aparece modificada por última vez en abril de ese año, pese a incluir datos de ingresos y pagos que llegan hasta diciembre.

En el caso del archivo BARCE93.xls, con las cuentas de ese año –otros tres archivos con nombre algo distinto también contienen los mismos datos contables de 1993–, la ultima modificación se produjo en abril de 1997, hace 16 años. El archivo correspondiente a 1994 (BARCE94.xls) fue modificado por última vez en 1998 y, en cuanto a la contabilidad B de 1995, la última modificación de BARCE95.xls es de 1998.

Finalmente, consta un archivo denominado «BARCE96.xls» con las cuentas correspondientes a ese año. En este caso aparece como fecha de creación y de modificación el 23 de octubre de 2011. A diferencia de los archivos anteriores, este «se creó en la versión de Microsoft Excel para Macintosh». Lo que sí que indica la antigüedad del archivo es que se creó inicialmente en una versión de Excel de 1993.

El informe no aclara de qué ordenador procedían los archivos. Sí dice que solo tres de los 13 fueron guardados directamente en el pendrive. El resto fueron «copiados o movidos desde otro soporte», lo que encajaría con al versión de Bárcenas de que estaban en el Toshiba cuyo disco duro destruyó el PP y que no permitía el acceso directo con pendrive.